CEOE Cepyme Huesca ha dado a conocer esta mañana en Jaca el balance del año 2025 con la presencia de su presidente, José Fenando Luna, y de la presidenta de ACOMSEJA (Asociación de Empresas de la Jacetania), Marian Bandrés. Luna ha asegurado que 2025 ha sido «un buen año»,marcado por el fortalecimiento del tejido empresarial gracias a la colaboración público-privada y ha asegurado que «el Valle del Aragón ha mostrado una capacidad organizativa y un dinamismo extraordinarios, superando las expectativas de las empresas del territorio».
Marian Bandrés, ha apuntado en este sentido que, «consideramos fundamental para nuestro territorio el desarrollo de proyectos ambiciosos, que refuercen nuestra marca, generen nueva economía y respondan a las necesidades de reformulación del actual modelo turístico, sobre el que ACOMSEJA ha abierto un proceso participativo con sus asociados para identificar sus debilidades, diagnósticos y propuestas de futuro.
Ante el nuevo escenario que se abre con las elecciones autonómicas convocadas para el próximo 8 de febrero, la presidenta de ACOMSEJA ha instado a todos los partidos que presentan candidaturas a «que incluyan en sus programas las inversiones públicas necesarias para transformar y fortalecer el modelo económico de nuestro territorio, basado principalmente en el turismo».
Bandrés considera los proyectos y las inversiones tienen que lograr en su origen el consenso de los habitantes del territorio «para que sean viables. Y esto se consigue con pedagogía y con un diálogo estrecho con las agentes políticos, económicos y sociales del territorio. Solo con un consenso social será posible sacar adelante los proyectos que nos propongamos».
El presidente de CEOE Cepyme Huesca, por su parte, considera que junto a la colaboración público-privada para desarrollar esos proyectos de futuro, es importante avanzar en la agilización administrativa y la declaración responsable. Sobre la primera, Luna incidía en que supone que muchas empresas duden en apostar por el territorio: «Como solución, exigimos una simplificación. Pusimos sobre la mesa combatir contra el silencio administrativo, de manera que si no hay contestación en 6 meses sobre un proyecto, la respuesta tenga que ser positiva».
También se han analizado en Jaca los cuatro principales problemas con los que han chocado -y siguen chocando- los empresarios oscenses. El primero está relacionado con la mano de obra, ya que «las ayudas básicas de desempleo se acercan mucho al SMI, por lo que es difícil encontrar trabajadores de labores básicas», ha indicado Luna
El segundo aspecto hace referencia a la escasez de vivienda para trabajadores, lo que supone que «haya una temporalidad que hay que intentar suplirla para mejorar las condiciones y atraer a más trabajadores». Otro punto son las trabas bancarias que se encuentran las pequeñas y medias empresas a la hora de solicitar y recibir créditos, medidas que han endurecido en los últimos años.
José Fernando Luna ha defendido la estrategia del Plan Pirineos,«que en un futuro dotará de sentido a proyectos de empresarios, sabiendo que hay una hoja de ruta definitiva». Mientras tanto, Marian Bandrés, ha ido más allá y reivindicado la necesidad de que el Gobierno de Aragón articule los mecanismos necesarios, a través de inversiones y proyectos estratégicos, que compensen la desigualdad histórica que el Valle del Aragón (fundamentalmente) sufre respecto a otros territorios vecinos en materia de inversión e infraestructuras públicas.
«Esta desigualdad ha generado unas claras debilidades en nuestra capacidad competitiva y de respuesta a los nuevos hábitos y demandas del turismo de nieve y montaña. El impulso público siempre incentiva a la inversión privada, que es la generadora de economía, desarrollo y riqueza. Y en este aspecto el Valle del Aragón arrastra unas debilidades estructurales que necesitan corregirse con urgencia» ha argumentado.
Para la presidenta de ACOMSEJA, el momento actual es una encrucijada para nuestro modelo económico, «con los retos que genera el cambio climático, la necesidad de evolucionar para responder a las nuevas demandas del turismo, la aspiración de un turismo de calidad (que se identifique con el territorio) y la importancia de consolidar el proceso de desestacionalización que venimos experimentando desde hace algunos años».
